Muchas maneras de ahorrar
Mucha gente puede tolerar el clima frío mejor que el clima caliente, lo que significa que, a medida que el clima se calienta más y más, se hará cada vez más difícil luchar contra el impulso de encender el aire acondicionado y dejarlo encendido durante horas. Afortunadamente, hay varias cosas que puede hacer para ayudar a mantener su casa fresca sin que se le suba la factura de la energía.
Tenga cuidado con el termostato:
Ponga la temperatura lo más alta posible sin dejar de estar cómodo. Cuanto menor sea la diferencia entre las temperaturas interiores y exteriores, más baja será su factura.
Mantenga la casa más caliente de lo normal cuando esté fuera, y fresca cuando llegue a casa. Establezca fácilmente las temperaturas de "Fuera" y "Casa" con un termostato programable.
Tenga en cuenta: Su casa no se enfriará más rápido si ajusta el termostato a una temperatura más fría de lo normal. De hecho, es probable que esto resulte en gastos innecesarios y en un esfuerzo excesivo para el sistema de enfriamiento.
Aproveche al máximo sus ventanas:
Evite que el calor entre por las ventanas instalando cubiertas de ventanas como persianas (interiores y/o exteriores), toldos, películas de alta reflexión, cortinas, persianas, paneles aislantes y contraventanas.
Si vive en un área donde se enfría por la noche, apague el aire acondicionado y abra las ventanas mientras duerme. Cuando te despiertes, cierra las ventanas y las persianas para mantener el aire fresco dentro, a menos que todavía haya una brisa fresca. Todavía puede entrar un poco de aire fresco en la casa por la mañana temprano antes de que el sol empiece a golpear su casa/patio.
Enciende esos ventiladores de techo:
Usando los ventiladores de techo en combinación con el aire acondicionado, puede ajustar el termostato cuatro grados más alto, pero recuerde que los ventiladores enfrían a las personas, no a las habitaciones. Si sale de una habitación, apague el ventilador.
Encienda el ventilador del baño cuando se duche o se bañe para eliminar la humedad y el calor.
Baje la temperatura del agua:
El calentador de agua utiliza el 18 por ciento del uso de energía de su casa. Baje la temperatura a 120 grados F.
Minimice el uso de electrodomésticos y la iluminación artificial:
Usar el horno en días calurosos hará que la casa se caliente y por lo tanto sea más difícil de enfriar. Pegue la estufa, el microondas o la parrilla afuera.
Reduzca al mínimo el uso de la computadora o la televisión, el uso del lavavajillas o el uso de aparatos calientes como los secadores de pelo.
Instale una iluminación eficiente que no libere mucho calor.
Selle las fugas para mantener el aire caliente fuera:
Sellar las grietas para evitar que el calor se filtre en la casa.
Añada burletes o calafateo para sellar ventanas y puertas con fugas.
Fuentes:
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